Después de una tensa reunión anoche entre los negociadores de La Habana, el ministro Rubén Darío Lizarralde y la Secretaria General de Presidencia María Lorena Gutiérrez quedó la conclusión que el Gobierno no solo retiraría el proyecto de ley de baldíos sino que no lo volvería a presentar.
Según supo La Silla, durante dicha reunión, Humberto de la Calle, jefe de la delegación de negociadores, le explicó a Lizarralde que todo el espíritu del proyecto iba en contra de lo acordado con la guerrilla en el punto número uno.
Lizarralde los invitó a participar en la corrección de los artículos que eran inconvenientes pero al final se concluyó que era mejor retirarlo del todo y no volverlo a presentar, porque entre otras cosas, no había tiempo para su trámite y era inconveniente políticamente.
Tocará ver si finalmente así lo hacen y también, qué hará el ministro Lizarralde luego de haber perdido este pulso.