La Silla Vacía revisó una muestra significativa de los datos que presentó Macías. Y verificó que casi la mitad de esas casi dos mil cuotas burocráticas corresponden a personas que están en su cargo desde el gobierno Uribe. Solo la otra mitad ha llegado desde que Santos es presidente; y de esos nombramientos hechos por el gobierno actual, la mitad ya no están en sus cargos.
Álvaro Uribe, ex presidente, candidato al Senado y gran opositor de Juan Manuel Santos, ha dicho que éste está comprando su reelección dándole cargos públicos a los congresistas y entregándole a éstos parte del presupuesto nacional para que compren votos. En concreto, ha dicho que Santos le entregó casi dos mil cargos a los parlamentarios:
Pte Santos:Carrusel de Reelección, 1968 cargos a congresistas, Colombia pierde 16 puestos en lucha contra corrupción Yo he dado la cara— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) diciembre 21, 2013
Esa cifra proviene de una denuncia que interpuso ante la Comisión de Acusaciones a finales de diciembre el candidato al Senado por el Centro Democrático Ernesto Macías, con gran eco mediático, y que está representada en una presentación en pdf que circuló por todos los medios. Esos datos, hasta donde supo La Silla, le llegaron a los uribistas de un antiguo funcionario de Presidencia, que los sacó de tres de los “computadores de palacio” de la Consejería Política y corresponden a datos de mediados de 2012.
Ante la gravedad de la denuncia, La Silla Vacía revisó una muestra significativa de los datos que presentó Macías. Y verificó, a partir de un sencillo ejercicio estadístico, que casi la mitad de esas casi dos mil cuotas burocráticas corresponden a personas que están en su cargo desde el gobierno Uribe. Solo la otra mitad ha llegado desde que Santos es presidente; y de esos nombramientos hechos por el gobierno actual, la mitad ya no están en sus cargos. Es decir, sí hay mermelada, pero diluida frente a lo que denuncian los uribistas.
Inicialmente eliminamos los datos que aparecían repetidos en la presentación. Por ejemplo, la misma información relativa a las supuestas cuotas del representante Hernando Padauí aparecía tres veces. También sacamos los datos que se referían a personas no reconocibles con nombre propio (por ejemplo, menciona la entrega de cargos a “director”) y aquellos funcionarios que no dependen de congresistas y carecen de peso electoral, como los 12 cargos técnicos que dependen del negociador en La Habana Sergio Jaramillo. Así, de entrada, una cuarta parte de las supuestas cuotas desaparecieron.
En ese primer filtro también encontramos que no hay sustento para las cifras de la plata entregada a los congresistas, por lo que tuvimos que limitar el estudio a las cuotas burocráticas.
Con las que quedaron armamos una base de datos con más de 1700 cargos.
De ellos, decidimos revisar los de las CAR, el Icbf y el Sena, tres de los fortines burocráticos usuales en todas las regiones (y cuyos dueños actuales estamos desentrañanado con la ayuda de ustedes en nuestro Mapa del Poder). En el caso del Sena, encontramos que buena parte de las cuotas salieron desde que Gina Parody asumió la dirección de esa entidad.
Según la denuncia, en esas entidades Santos habría entregado 151 cargos a los congresistas para que lo apoyaran en su reelección. Es decir, obtuvimos una muestra aleatoria del 9 por ciento de todas las cuotas, lo que da un resultado final con alrededor del 7,5 por ciento del margen de error. De ellos, 45 fueron imposibles de verificar porque la presentación no da datos suficientes.
Por ejemplo, dice que el representante conservador de Norte de Santander Ciro Rodríguez Pinzón tendría 11 cargos temporales en el Fondo Nacional del Ahorro, sin explicar en qué oficina específica o en cabeza de qué persona. Lo mismo ocurre con las tres asesorías a varias oficinas municipales que le habría entregado el Banco Agrario a recomendados del senador Conservador Efraín Cepeda. En este caso, tampoco da nombres.
Así, de los 151 cargos, un tercio son señalamientos imposibles de comprobar.
De los que quedaron, revisamos en detalle los 64 de nivel directivo.
Encontramos que 17 funcionarios son o fueron fichas de los congresistas que menciona la denuncia.
Por ejemplo, Jairo Jaimes, delegado del presidente en la Corporación Autónoma de Santander, es tan cercano a la representante conservadora Lina Barrera que renunció a su aspiración de ir a la Cámara en 2010 para adherir a la de ella, y un año después fue nombrado en el cargo. Otro caso es el del director del Icbf en Tolima, Carlos Buenaventura, quien sonó fuertemente como fórmula a la Cámara del representante de la U Jaime Yepes si éste saltaba al Senado, pero finalmente Buenaventura se quedó en el cargo y Yepes no va a dar el salto.
Otros 17 posiblemente son cuotas entregadas por Santos a congresistas.
Por ejemplo, la denuncia dice que la delegada del presidente en el consejo directivo de Corponor, Doris Asela, es ficha del senador azul Juan Manuel Corzo y, aunque no pudimos verificarlo, el poder del senador en esa CAR es reconocido y ella tiene un perfil mucho más bajo que el de otros delegados presidenciales en las CAR nombrados por Santos en el mismo decreto de ella; también hay denuncias e informes de prensa que señalan el poder de la senadora conservadora Myriam Paredes sobre la regional del Icbf en Nariño, pero no pudimos comprobar que la ex directora Alba Chamorro fuera cuota suya, como dice la denuncia.
Sin embargo, también hallamos seis cargos que claramente no coinciden con lo denunciado.
Por ejemplo, la denuncia señala que César de Hart llegó a ser delegado del presidente en la Cdmb como cuota del senador de Cambio Radical Bernabé Celis. Pero de Hart tiene una relación directa con Santos (de hecho su hijo fue viceministro de Comercio en este gobierno) y están en diferentes orillas políticas de la de Celis: incluso, la esposa de De Hart, Martha Pinto, hizo campaña a la alcaldía de Bucaramanga en la orilla opuesta del candidato de Celis, el hoy alcalde Luis Francisco Bohórquez.
Otras cuatro presuntas cuotas son muy improbables, como la de que Jaime Triana, delegado del presidente en la Corporación Autónoma del Alto Magdalena, sea ficha del senador huilense Hernán Andrade. Nada encaja: Triana es liberal y Andrade conservador; Triana tiene su propia trayectoria política e incluso fue congresista; Triana está en el cargo desde 1993 cuando Andrade aún no era congresista; y Triana votó contra el candidato de Andrade en la reciente elección de director en 2013.
En otros 20 casos no pudimos conseguir información suficiente para dar una valoración porque en sitios como Vaupés o Guainía nos quedó difícil rastrear quién era quién.
Al final, de los 44 cargos directivos que pudimos revisar, tres de cada cuatro probablemente sí son o fueron cuotas de un congresista, como denunció Macías. Pero no solo de Santos.
Al revisar cuándo fueron nombrados, encontramos que 21 de estos 44 funcionarios llegaron a su cargo durante el gobierno de Uribe. Dos, el delegado del presidente en el consejo directivo de la Corporación Autónoma del Alto Magdalena y la directora regional del Sena en San Andrés, venían del gobierno de Pastrana y de Gaviria, respectivamente. En total, solo 21 podrían haber sido nombrados por Santos para comprar su reelección.
Y de estos 21 nombrados por Santos, solo 13 conservan el cargo.
Al final, y a menos de que la situación sea muy diferente en las cuotas denunciadas en otras entidades, nuestro ejercicio señala que alrededor de una tercera parte de las cuotas denunciadas sí son fichas de congresistas nombradas por el gobierno Santos, que eventualmente podrían ayudar a sus padrinos y al presidente en sus reelecciones. Es decir, la denuncia de Macías está muy inflada.
Además, la mitad de los nombramientos que, según los uribistas, son la moneda con la que Santos paga el apoyo de los congresistas, ocurrieron en el gobierno de Uribe. La pregunta que queda es si estos ya eran cuotas burocráticas en el gobierno anterior, o qué ha cambiado desde entonces.
Esta es la base de datos que construimos. Si tiene información de otras cuotas en estas entidades, le agradecemos que nos la envíe a jlewin@lasillavacia.com para verificarla e ir enriqueciendo la información.