Anoche se publicó la Invamer Poll, la encuesta que hace la medición continua del clima de opinión más abarcadora en Colombia, desde 1994 en algunas preguntas. Esta edición se realizó entre el 8 y el 25 de octubre, por lo que no alcanza a capturar del todo la captura de alias “Otoniel”.
La Invamer es una encuesta que refleja la opinión urbana. Tiene un universo de alrededor de 10 millones de personas, en cinco ciudades: Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla, y Bucaramanga. No es una encuesta de intención de voto, sino de percepción.
Frente al clima de hace dos meses, la encuesta muestra un estancamiento del pesimismo, que no mejora frente a la medición anterior a pesar de signos de reactivación económica. El Gobierno Duque sigue teniendo un nivel alto de desfavorabilidad, junto a la mayoría de instituciones del país. Pero la percepción negativa golpea especialmente a los mandatarios locales, que, casi sin excepción, registran descensos notables de favorabilidad.
La reactivación económica no se siente

A pesar de los muy prometedores pronósticos de crecimiento de la economía en 2021, la reactivación no se siente. Al contrario, el nivel de satisfacción con el estándar de vida de los colombianos llega a su peor medición en una década. El 57 por ciento de los encuestados están insatisfechos con su situación personal, sin mejora frente a la medición anterior.
Las mediciones sobre la percepción de la economía, más allá de la situación personal, siguen igual de mal, con un 81 por ciento que opina que está desmejorando, ligeramente superior a la medición anterior. La situación del empleo, que en agosto había mostrado una mejora sustancial, se estancó en octubre, y no muestra mejoría.
La percepción tan negativa sobre la economía muestra que, por ahora, el discurso de reactivación que el Gobierno busca impulsar en los meses finales de su mandato no está calando en la opinión.
Antes de finalizar el año vienen tres días sin IVA, el pico estacional de empleo de fin de año, que podrían ayudar. Pero también se espera una alta inflación y un problema global de abastecimiento que será un reto para la mejora de la situación económica.
Duque, peor que Santos a menos de seis meses de elecciones

La desfavorabilidad de Duque en octubre del 2021 es casi calcada a la de Juan Manuel Santos en 2017. Ambos registraron una desfavorabilidad cercana al 70 por ciento y una favorabilidad bordeando el 20 por ciento. No solo eso, en las preguntas generales sobre temas que usualmente reflejan la gestión del Gobierno nacional, el espejo se mantiene, y en varios casos, el reflejo es más halagador para Santos hace cuatro años que para Duque hoy.
Frente a preguntas sobre el manejo del “desempleo”, el “costo de vida”, la “corrupción” y la “inseguridad” los números de Duque son peores que los de Santos. En los dos últimos, la desfavorabilidad durante el Gobierno Duque está por encima del 90 por ciento, con niveles históricos de desaprobación.
Entre precandidatos, Petro es el único que mejora

Y no mucho. El precandidato del Pacto Histórico, la coalición de izquierda que lidera, aumentó cinco puntos en favorabilidad, por encima del márgen de error. Sigue con un negativo (45%) más alto que positivo (40%), al igual que todos los precandidatos por los que pregunta —por favorabilidad, no intención de voto— la Invamer Poll.
Sergio Fajardo está en su peor punto desde que lo mide la encuesta, en 2006. Su negativo es mas alto que su positivo, (35% vs. 32%), tras unas semanas en las que ha tenido que defenderse de una investigación penal y una disciplinaria, que ya falló contra él en primera instancia. Además, a Fajardo cada vez lo conoce menos gente.
La tercera que tiene más reconocimiento es María Fernanda Cabal, quien también tiene el peor saldo de favorabilidad, con 46 negativo y 8 positivo.
Mucho más abajo en nivel de reconocimiento están los demás precandidatos. Todos por los que pregunta la encuesta (Federico, Galán, Rodolfo, Peñalosa, Gaviria, Oscar Iván, Paloma, Cabal, Robledo, Roy, Dilian, Echeverry, John Milton) tienen también saldos negativos.
En lo local, todos caen menos Quintero y Clara Luz Roldán

Frente a la medición de hace dos meses, y el pesimismo generalizado sostenido en casi todos los temas, los mayores cambios que registró la Invamer fueron a nivel local. De nueve alcaldes o gobernadores evaluados en las cinco capitales, todos, excepto el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, y la gobernadora del Valle, Clara Luz Roldán, registraron caídas en favorabilidad.
En Bogotá, Claudia López no ha podido romper la tendencia de deterioro de su imagen y ya está en números negativos consolidados. Tiene una favorabilidad de 37 por ciento, frente a una imagen negativa de su gestión de 60 por ciento. Aún más, la percepción negativa del rumbo de la capital volvió a un punto alto histórico, frente a sus dos antecesores, de 86 por ciento.
En Cali, el alcalde Jorge Iván Ospina vuelve a números rojos, con una desfavorabilidad del 76 por ciento, que no había registrado ningún alcalde desde Apolinar Salcedo. También caen los charistas Elsa Noguera, gobernadora de Atlántico, y Jaime Pumarejo, alcalde de Barranquilla, aunque aún tienen saldos cómodos de favorabilidad.
La tendencia puede sugerir que problemas como la inseguridad, que se reflejan sobre los mandatarios locales, están jugando un papel. Si bien no es el tema de mayor preocupación de los colombianos, va en una tendencia ascendente.
No hay un “mayor problema” constante

Desde junio de 2020, en la pregunta de la Invamer Poll sobre cuál es el mayor problema que tiene el país, hay un cambio entre cada medición. En esta medición corrupción y desempleo/economía tienen un empate técnico, pero han sido preocupaciones que suben y bajan, alternándose entre sí, en cada entrega de la encuesta, con la categoría de “otros” (que agrupa educación, salud, narcotrafico, y un largo etc.).
Esto muestra que en Colombia no hay un solo gran tema, y que la opinión que mide la Invamer Poll es susceptible a coyunturas, como la de Centros Poblados, que elevó la preocupación por la corrupción en la medición de agosto. Esto, a su vez, sugiere que la elección del próximo año no será definida por el portador de una gran bandera y que será susceptible a eventos imprevistos.
Aún así, el tema de la inseguridad, que desde el inicio de la pandemia había bajado considerablemente, viene en un aumento sostenido para meterse en la baraja de preocupaciones principales, junto con la economía y la corrupción.
Por otro lado, esta pregunta muestra que el coronavirus, que nunca logró ser la preocupación principal en la Invamer Poll, que pregunta por el tema desde abril del 2020, ahora ocupa un último lugar en la escala de preocupaciones. Solo la menciona el 1 por ciento.