Gustavo Bolívar, el candidato del petrismo en Bogotá, ha insistido en que “la toma” que está haciendo esta semana el presidente Gustavo Petro en la capital no es parte de su campaña. Sin embargo, la marcha multitudinaria patrocinada por el mismo gobierno y las visitas en localidades donde vencieron en las presidenciales, sí le ayuda al exsenador a amarrar los votos de la izquierda y a justificarse con los decepcionados que no han visto el cambio. 

De hecho, en la marcha se vio publicidad a favor del candidato y se escuchó gente que gritaba: “Bolívar, Bolívar, Bolívar”. 

La campaña del exsenador muestra que hasta ahora la apuesta está en unir a la izquierda, más que en conseguir votos nuevos. También consiste en asegurar el paso a la segunda vuelta y no perder votos con otros candidatos. 

Bolívar compite por el segundo lugar con Juan Daniel Oviedo, tercero en intención de voto en la encuesta de La Silla (y en empate técnico en otras). El exdirector del Dane, pese a que viene de hacer una carrera con el uribismo, genera simpatía entre los petristas.

Bolívar: en modo consolidar la izquierda 

En esta campaña, el exsenador ha tratado de unir a los candidatos que no quedaron muy contentos con el orden de las listas al Concejo y a ediles en Bogotá. También a otros sectores que se apartaron de la candidatura del petrismo hace cuatro años. En esa tarea esta semana ya sumó el apoyo de feministas que no apoyaron a Hollman Morris en 2019. También hizo oficial el apoyo de verdes petristas a su campaña y de profesores del magisterio.

La toma en Bogotá también le sirve para su misión de unir a la izquierda. A menos de una semana de las elecciones, el presidente convocó una marcha para apoyar las reformas del gobierno el martes, y estará haciendo consejos de seguridad y visitas hasta este jueves en tres localidades, Kennedy, Suba y Engativá, para escuchar las necesidades de ciudadanos. En esos recorridos lo acompaña su gabinete, funcionarios del gobierno, congresistas y también han asistido algunos candidatos de las listas del Pacto Histórico.

“Aunque digan que no, la toma es un espectáculo que muestra una intención de Petro para mover a Bolívar”, dijo el estratega político Ángel Becassino. “Probablemente, su presencia en la calle va a ayudar a disolver las dudas de las personas que no estaban tan seguras de votar por Bolívar”.

En la misma línea, el analista Camilo Granada dijo: “Bogotá es la ciudad que menos necesita en comparación con otros territorios en el país. Que el presidente decida visitarla ahora por supuesto que es una movida para impulsar a Bolívar”. 

La toma seguramente no servirá para conseguir votos nuevos porque están hablando a la gente que sale a protestar a las calles y están yendo a las localidades donde Petro ganó en 2022. Pero es útil, según Granada, porque “Bolívar necesita no perder ningún voto del petrismo y convencer a los que hoy están decepcionados con el gobierno para pasar a segunda vuelta”. 

En la marcha, el presidente Petro no habló de la candidatura de Bolívar, pero sí habló de por qué no ha podido hacer el cambio que había prometido. Dijo, con la Plaza de Bolívar a reventar, que le hacía un llamado a “la oligarquía, a los empresarios, a la élite y a los que tienen más poder que el presidente aunque no sean elegidos por el pueblo” para que les permitieran hacer las reformas en torno a la tierra, la educación y la paz total. 

El mensaje caló. 

“Me siento feliz de lo que dijo Petro porque él está tratando de hacer el cambio, solo que tenemos una oposición muy mala (…) Por eso vine a apoyar al cambio para que la oposición vea que estamos con él”, dijo Blanca Rodríguez, una de las asistentes a la marcha en la plaza. 

“Me parece excelente que el presidente esté visitando Bogotá y que no sea solo pantalla. Él siempre ha estado pendiente del pueblo”, dijo Yesid Arias, uno de los residentes de Kennedy, la localidad que visitó esta semana Petro. Arias dijo que va a votar por Bolívar. “Es que el presidente no ha podido hacer todo lo que quiere por culpa de los partidos, por eso hay que seguir apoyando al cambio”.

Olga García, una tendera en Kennedy, también dijo: “Yo sí voy a votar por su candidato Bolívar porque él es como Petro, que viene del pueblo”. Agregó que le gustaba que el presidente visitara la localidad “para que vea como nos tiene la inseguridad aquí”. 

Además, el gobierno tiene un as bajó la manga que puede dar otro golpe de opinión. Tras el consejo de seguridad en Kennedy, dijo que viajaría a China a reunirse con el presidente de ese país. Dentro de la campaña de Bolívar le aseguraron a La Silla: “No hay la más mínima posibilidad de que no hable del metro para que pueda ser subterráneo”. Aunque no es claro qué logre el presidente, mostraría a sus electores un intento más por cumplir lo que quería para Bogotá. 

Eso le podría ayudar con quienes hoy están decepcionados. 

En la marcha un joven de la primera línea le gritaba a Bolívar: “No se olvide de la primera línea, no se olvide del portal Resistencia”. 

“Rasta”, un joven paramédico que acompañó las protestas en el Portal Américas, dijo a La Silla: “Fueron un engaño, terminaron con los mismos políticos de siempre y haciendo lo mismo que criticamos con lo de Laura y Benedetti”. Explicó que por Bolívar no votará porque “abandonó a la primera línea, pensamos que por lo menos les iba a dar un trabajo llevando cables en los canales donde hace novelas, pero nada, los olvidó”.  

Al preguntarle por quién iba a votar, Rasta dijo que para él era muy difícil votar por los apellidos de la élite “como Galán o Lara”. Por eso, aseguró, va a votar por Oviedo, aunque venga del uribismo. “Al menos es pilo. Y no lo he visto con concejales ni políticos”.

El apoyo de este joven manifestante es solo un reflejo de lo que muestran las encuestas con respecto a la simpatía que tiene Oviedo en el petrismo en comparación con Galán. Otra muestra es que el mismo presidente Petro lo invitó a quedarse a trabajar con él en su gobierno, aunque ese empleo nunca se concretó.

Oviedo, una amenaza necesaria para Bolívar

Esta semana el Consejo Nacional Electoral (CNE) dejó en firme la candidatura de Oviedo. Su aspiración peligraba porque había rentado una oficina pública a menos de un año de las elecciones. Firmar contratos con el Estado en menos de ese tiempo puede ser causal de inhabilidad, pero al final el CNE no lo hundió. 

Uno de los primeros en felicitar a Oviedo fue Bolívar. “Celebro que siga en contienda por la Alcaldía de Bogotá”. Y agregó que aunque no tienen afinidad ideológica, “es de los pocos en la derecha con los que se puede debatir con altura, decencia y con argumentos”.

Según explicó a La Silla el analista Granada, “si a alguien le sirve que Oviedo esté en la contienda es a Bolívar porque le muerde votos a Galán, y hace que le quede muy difícil ganar en primera”.

De acuerdo a las cifras de la encuesta de Atlas para La Silla, Galán tiene el 35 por ciento de intención de voto, Bolívar del 22 y Oviedo del 16. Para ganar en primera vuelta, Galán necesita el 40 por ciento de los votos y llevarle 10 puntos de ventaja al segundo. Ya cumpliría con los puntos de ventaja en esta medición, pero necesitaría al menos 5 por ciento de la votación para llegar al 40 por ciento ganador. 

Ahora, aunque a Bolívar le sirve que Oviedo esté en la carrera por Bogotá, al tiempo, es una amenaza porque en las mediciones pierde con él en segunda vuelta, y es el que le está compitiendo por llegar a segunda vuelta con Galán. 

Oviedo además crece más que Galán entre los votantes de Petro. El candidato del Nuevo Liberalismo pierde 17 puntos de intención de voto entre los votantes del presidente, mientras que Oviedo mantiene el 16 por ciento. 

El exdirector del Dane además tiene más simpatía que Galán entre los petristas. Frente a los votantes de Hollman Morris en 2019, Oviedo tiene un 20 por ciento de imagen positiva, mientras que Galán 7,5. Frente los votantes de Gustavo Petro en 2022 en segunda vuelta, Oviedo tiene un 41 por ciento de imagen positiva, mientras que Galán, 30. Y aun con los votantes de Claudia López, Oviedo tiene 10 puntos más de imagen positiva por encima de Galán. 

“Esa simpatía por Oviedo entre algunos petristas confirma mi teoría de que Bolívar no puede perder un solo voto del petrismo”, dijo Granada. “Por eso hoy su apuesta es quedarse con todos los votos del petrismo para poder pasar a la segunda vuelta, y para eso la toma del presidente le sirve”.

Bolívar ha dicho que si las encuestas son verdad, solo necesita que cada uno de sus votantes “consiga un voto más para ganar en primera”.

Soy periodista de Bogotá en La Silla Vacía. Estudié periodismo en la Universidad Externado y después trabajé en la Revista Semana. Allí cubrí cultura e informes especiales en un comienzo y más tarde Bogotá y confidenciales. Me pueden escribir a pdoria@lasillavacia.com o a @PaulaDoriaG en Twitter.