La Silla Vacía supo de buena fuente que el guerrillero Fabián Ramírez está herido pero vivo. Con esta, han sido varias las veces que ha logrado salvar milagrosamente su vida. Hace unos ocho años, sufrió una hepatitis B, y después de varios meses de recuperación quedó muy afectado del hígado pero se salvó. Luego, de regreso al campamento, después de su recuperación, un rayo le cayó al lado, lo dejó malherido, pero se salvó también. Y ahorita es el primer comandante que sobrevive a un bombardeo contundente de las Fuerzas Militares.