La industria tabacalera hará llegar esta semana al Senado un documento donde consignará sus opiniones sobre el proyecto de ley que busca atacar el consumo del cigarrillo mediante una serie de restricciones como la prohibición de la publicidad a todo nivel y la venta de este al menudeo. Aunque están de acuerdo con que los regulen, e inclusive con que se aumenten los impuestos al tabaco, como lo plantea el Ministerio de Hacienda, a las empresas les preocupan las propuestas que surgieron en las últimas semanas en la Comisión Séptima, pues consideran que son extremas, al punto que les cierra las opciones de hacer publicidad por cualquier medio. Pero hay algo que además no está claro, y así lo han dicho en privado: mientras el proyecto pretende atacar el consumo, el Gobierno les pide que aumenten las siembras en 10 mil hectáreas en los próximos tres años.