Para los inversionistas Santos es más cómodo, pero Mockus no representa un riesgo

 

 

 

El reciente crecimiento de Antanas Mockus en las encuestas y el empate técnico entre los dos candidatos trae un nuevo nivel de incertidumbre política al país, donde hasta hace poco una victoria de Juan Manuel Santos se veía como inevitable. Normalmente, la incertidumbre es mala noticia para los mercados, pero a pesar de que un sesgo pro-Santos sigue existiendo entre los inversionistas extranjeros, a Mockus no lo ven como un peligro. Para algunos, incluso representa la posibilidad de mejores relaciones regionales.

El presidente Uribe goza de gran simpatía en los mercados internacionales pues desde el principio convirtió a la “confianza inversionista” en uno de los pilares de su gobierno. Entre las mejoras en seguridad, y las políticas tributarias favorables, logró en sus dos periodos multiplicar por cinco la inversión extranjera directa, de 2.000 millones de dólares en 2002 a 10.000 millones estimados para este año.

Ha intentado además devolver al país al nivel de grado de inversión, que evalúa el riesgo crediticio de los países y que Colombia perdió durante la crisis fiscal de los noventa. Hasta ahora, solamente DBRS, una empresa de rating de créditos canadiense relativamente pequeña, le ha devuelto al país esa calificación. Uno de los retos del próximo Presidente será lograr que también lo hagan las agencias más grandes y reconocidas como Standard and Poor’s y Moody’s.

Por eso Juan Manuel Santos, que representa la continuidad de las políticas de Uribe, es visto con muy buenos ojos en el mundo financiero, donde en general, están satisfechos con el status quo y confían en que este ex Ministro de Hacienda educado en Harvard y en el London School of Economics seguiría sin chistar el camino que ha trazado Uribe.

Un análisis de Alberto Bernal, analista de la firma Bulltick Capital Markets, predice que Santos seguirá las políticas de Uribe con una intensidad del 95 por ciento mientras Mockus las seguiría con una intensidad entre 75 y 80 por ciento. Bernal considera que Mockus sería menos ‘terco’ con las FARC y consideraría una negociación, pero en términos de políticas económicas “las diferencias son sutiles” y ambos candidatos son favorables al libre mercado.

El 19 de abril del mes pasado, un artículo publicado por el diario  Wall Street Journal reportó una caída en el precio del peso frente al dólar, y citó a Rupert Stebbings, analista de la firma Interbolsa, diciendo que sospechaba que “el mercado empezaba a ponerse nervioso por Antanas Mockus”.

Sin embargo, tanto analistas consultados por La Silla Vacía, como reportes de agencias de cálculo de riesgos, coinciden en que en estas elecciones no hay mayor temor en los mercados, pues no se cree que ninguno de los dos candidatos que lideran las encuestas llevarían a cabo reformas radicales. “Las variaciones que hemos visto recientemente responden más a los eventos internacionales como la crisis griega y la demanda del gobierno estadounidense contra la firma Goldman Sachs que a temores por los eventos políticos en Colombia,” dijo un analista de riesgo de una firma en Bogotá que prefirió no ser citado.

Las firmas de análisis de riesgo citan el buen manejo fiscal que le dió Mockus a Bogotá como alcalde, pero no hay un consenso sobre los efectos que tendría la falta de representación del Partido Verde en el Congreso. Mientras Business Monitor International lo ve como una ventaja porque un Congreso uribista evitaría reformas significativas en políticas económicas o de seguridad, el economista Alberto Ramos, de Goldman Sachs, afirma que “aunque no hay dudas de que quien gane seguirá políticas pro-mercado, algunas personas en Wall Street temen que Mockus tenga problemas de gobernabilidad” por su baja representación en el parlamento.

Business Monitor International, una empresa que mide riesgos de inversión en 175 países, reconoce que aunque el mercado se siente más cómodo con Santos porque lo conoce mejor, Mockus podría tener una ventaja en sus relaciones con los vecinos.

Por un lado, pronostican mejores relaciones con Venezuela y Ecuador,  dos de los más importantes socios comerciales del país, y posiblemente con la administración de Lula en Brasil a menos que gane José Serra, el candidato de centro derecha, en las elecciones de octubre. Por otro lado, esperan que “el compromiso de Mockus con temas de legalidad sería bien recibido en los Estados Unidos, donde legisladores demócratas han detenido la aprobación del Tratado de Libre Comercio por falta de progreso en temas de derechos humanos durante la administración Uribe.”

En otras palabras, Santos le gusta a los inversionistas porque representa más de lo mismo, representa literalmente la famosa “confianza inversionista” del Presidente. Mockus, aunque no es visto en los mercados como un riesgo, es al fin y al cabo menos conocido. Por eso, combina un cierto nivel de incertidumbre con la esperanza de una mejora de la situación de Colombia en la región.
 

Fue reportera política de La Silla Vacía.