La empresa operadora de aseo Rediba no ha entregado la información necesaria para actualizar el Pgirs y encontrar una alternativa al relleno sanitario que es de su propiedad.
Hace tres meses y en medio de la campaña para revocarlo, el alcalde Darío Echeverri dijo que el relleno sanitario de la operadora Rediba finalmente cerraría en octubre. Pero nuevos incumplimientos de la empresa tienen ese plazo en duda.
Echeverri se eligió con la bandera de cerrar definitivamente el relleno de Rediba, de propiedad del poderoso Reinaldo Bohórquez, quien también está construyendo la planta de tratamiento de agua del municipio.
Como lo contó La Silla, ese relleno ha sido cuestionado porque está en una zona de reserva ambiental y porque desde finales de 2015 fue clausurado por la Corporación Autónoma Regional (CAS) por malos manejos ambientales. Sin embargo, sigue funcionando por un decreto de emergencia sanitaria de la Alcaldía, porque el municipio no tiene otro lugar para echar las basuras.
Y aunque durante su primer año de gobierno Echeverri no avanzó en encontrar una solución, en febrero de este año contrató la actualización del plan de gestión de residuos sólidos (Pgirs) que determina qué alternativas hay para disponer las basuras, distintas al relleno de Rediba.
Y aunque en abril volvió a decretar la emergencia sanitaria para seguir usando el relleno, le puso un ultimátum al cierre definitivo: el 30 de octubre.
Según el cronograma de ese decreto, para el 7 de julio debía estar listo el Plan de Gestión de Residuos Sólidos, Pgirs, y se pondría en marcha para tener todo listo en octubre
Sin embargo, desde el 30 de mayo está parada la actualización del Pgirs porque Rediba no le ha entregado al consultor la información detallada de las toneladas de basura que dispone, los usuarios que tiene y la actualización de las tarifas.
“Estamos esperando que nos den datos estadísticos actualizados, con soportes. Sin eso sería la actualización del Pgirs pero con información vieja”, le dijo a La Silla Liliana Granados, representante legal de Estrategia 5, la empresa contratista que está haciendo la actualización del Pgirs.
Según el acta de suspensión de su contrato, tanto la Alcaldía como Estrategia 5 le han pedido muchas veces a Rediba la información, pero la empresa ignora sus requerimientos o entrega datos a medias.
Prueba de ello es que el consultor y la Alcaldía le enviaron a Rediba un oficio el 27 de abril y la empresa solo contestó el 2 de junio, cuando ya habían suspendido el contrato, y lo hizo a medias.
La Silla intentó hablar con Rediba pero no contestaron en ninguno de los teléfonos de las oficinas. Igualmente intentamos hablar con el secretario de Medio Ambiente al respecto, pero solo quiso decir que Rediba ya había entregado la información pertinente y que el contrato lo reanudarían pronto. Sin embargo, no precisó fechas, ni qué tipo de información, así como tampoco nos respondió sí habrá algún tipo de sanción para la empresa por el incumplimiento.
Y contrario a lo que dijo el secretario, Liliana Granados le dijo a La Silla que aún no han recibido la información para terminar la actualización.
De modo que el plan de acción que decretó el Alcalde para cumplir su promesa de campaña ya lleva un mes de atraso. Habrá que ver cuánto más logra dilatar Rediba lo que podría sacarlos del negocio de la disposición de basuras de Barrancabermeja.