En estos momentos se está terminando la Asamblea de Gobernadores con un almuerzo entre esos mandatarios y el presidente Juan Manuel Santos en el centro de Manizales. Ese dato, totalmente anecdótico, tiene una carga política: Santos no quiso hacer el almuerzo en el hotel donde se desarrolló toda la asamblea porque los dueños de ese lugar son uribistas consumados.

La reunión de los gobernadores fue en las Termales Del Otoño, un hotel y centro de convenciones que queda en las afueras de Manizales que ya fue objeto de una pequeña controversia en octubre del año pasado.

Esa vez Santos visitó Manizales, se alojó en ese hotel y tuvo que ocupar la suite “Álvaro Uribe Vélez”.

El nombre de esa habitación se convirtió en una pequeña tormenta. Cuando Santos se enteró de ese detalle se molestó, e incluso pidió alojarse en otro lugar, algo que finalmente no se pudo hacer porque ya era tarde en la noche y no había cómo desplazarse a otro hotel.

El episodio de la molestia de Santos disparó una serie de rumores, sobre todo uno que decía que Álvaro Uribe era accionista del hotel. El hoy senador, que en 2010 estuvo como Presidente en la celebración de los 25 años del hotel, negó que tuviera inversiones en el hotel, y el dueño, Carlos Arturo Gallego, debió salir a explicar que es amigo personal de Uribe pero que éste no tiene ninguna participación en el hotel.

Con ese antecedente, el almuerzo de hoy se programó en otro lugar y los gobernadores, que se reunieron en Termales Del Otoño con el vicepresidente Germán Vargas, tuvieron que desplazarse al tradicional Club Manizales.

Fui usuario y luego periodista de La Silla Vacía. Tras más de una década haciendo de todo en esta escuela de periodismo, de la que fui director editorial, me fui a ser lector y SuperAmigo. Ahora me desempeño como redactor jefe de El País América Colombia.