La campaña de la Gobernación del Valle está en el congelador. Sólo el nombre de Dilian Francisca Toro, exgobernadora y actual directora del partido de La U, suena con fuerza y aún no tiene un contendor fuerte.
Pero el panorama puede cambiar dependiendo de cómo termine la puja por el aval del partido Conservador. Uno de los aspirantes, el concejal Fernando Tamayo, podría aglutinar el partido y convertirse en un contrincante importante si la colectividad lo escoge. Ante esa amenaza, tres fuentes le dicen a La Silla Vacía, que Dilian Francisca Toro está impulsando a un contrincante dentro del Conservador.
Se trata del diputado John Jairo Caicedo, cercano a Toro. Si gana el aval, Caicedo eliminaría al mayor competidor que, hasta ahora, puede tener Toro, y, según cercanos consultados, se terminaría uniendo a su campaña.
Contexto
Los precandidatos godos
En el Valle político, la sensación era que la directora de La U podía ganar la Gobernación por W porque no tenía contrincante que pudiera dar la pelea. Pero con la precandidatura de Fernando Tamayo, el concejal empezó a perfilarse como el candidato que podía hacerle contrapeso a Toro.
El pasado 8 de mayo, el concejal conservador oficializó su precandidatura a la gobernación del Valle. Él es un comunicador social de la Universidad del Valle con un posgrado en derechos humanos, que lleva 20 años como concejal en Cali (19.948 votos en las elecciones de 2019). En ese tiempo ha consolidado una estructura política propia bajo su movimiento Juntos Podemos Todo.
En la rueda de prensa en el Club de Ejecutivos, al norte de la ciudad, Tamayo dijo que iría hasta el final, pero aceptó que la contienda electoral no sería fácil. Lo decía porque hasta ese momento, y a pesar de tener ocho precandidatos inscritos para recoger firmas, el nombre de Toro era el único que sonaba para la gobernación desde que el senador Alexander López del Pacto Histórico (Polo), decidió no lanzarse.
Tamayo tiene a su favor que lleva dos décadas como concejal de la ciudad que pone más del 40 por ciento de los votos a la gobernación del Valle. Su bandera principal es la seguridad, una de las que más se está moviendo en el departamento por la atomización del conflicto y porque su capital, Cali, es la que recibe los coletazos de lo que pasa en el Pacífico.
A su vez, el concejal tiene la capacidad de ser el candidato que agrupe el voto contra Toro y su grupo político, que lleva ocho años gobernando el Valle. También pueden llegar a su campaña quienes han estado acompañando a Toro porque no había otro candidato en el panorama. Una fuente cercana al Pacto Histórico le dijo a La Silla que a Tamayo lo veían con buenos ojos porque podía quitarle votos a Toro y dividir a la derecha en el departamento.
El concejal aseguró que su aspiración era una apuesta por “recuperar la vocación de poder del partido Conservador” porque, según él, “o reaccionamos como conservadores o desaparecemos”. Hoy esa colectividad tiene tres diputados en Valle, tres concejales en Cali, no tiene ni senadores ni representantes del departamento y lleva dos elecciones regionales sin candidato propio a la Gobernación.

Le sale competencia a la competencia de Dilian
Unos 20 días después del lanzamiento de la precandidatura de Tamayo, el diputado John Jairo Caicedo, actual presidente de la Asamblea del Valle, también oficializó su aspiración y entró a pelearle el aval al concejal. Caicedo es un abogado con maestría en formación sociolaboral, viene de ser concejal en Buga y lleva dos periodos como diputado conversador (24.127 votos en las elecciones de 2019). Además, es un líder sindicalista reconocido en Valle: es presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de Colombina y presidente de la Confederación de Trabajadores de Colombia.
Un periodista que conoce la movida política en el departamento, una persona cercana a Toro y un miembro del partido Conservador, le dijeron a La Silla que Caicedo es ficha de la exgobernadora del Valle.
El conservador Diego Ramos, expresidente del directorio departamental del partido afirmó: “Caicedo le está haciendo el favor a Dilian para ver si nos divide acá. Dilian cada que puede quiere desbaratar el partido Conservador, acá lo que necesitamos es recuperar la colectividad. Sabemos que Caicedo está con una pata donde Dilian y otra acá mientras hace el daño”.
Las otras fuentes afirman que se lanzó porque ella se lo pidió con el fin de hacerle zancadilla a Tamayo, quedarse con el aval, hacer una campaña corta y terminar uniéndose a Toro cuando avance la campaña. De esa forma, la contienda electoral quedaría con la exgobernadora como única candidata con posibilidades de ganar.
“Presentando una candidatura amiga Dilian puede controlar. Con John Jairo Caicedo ella ataja al que no puede atajar: a Tamayo”, comentó una persona cercana a Toro que aseguró que el diputado es ficha de ella. “La estrategia de Dilian es permear a los conservadores para quitarle el aval a Tamayo, a quien algunos ven como una figura capaz de hacerle contrapeso a Dilian y a quien se le han venido acercando enemigos de ella”, dice un periodista que conoce la movida en el departamento, pero que no detalló quiénes se estaban acercando.
Caicedo admitió su cercanía con Toro, pero negó que fuera su candidato: “Dilian Francisca es una gran líder, la admiro y la respeto. Somos amigos, no tengo que ocultarlo, pero esta candidatura es un tema de partido, de colectividad, una iniciativa democrática. Ser amigo no significa que sea su candidato”.
Sin embargo, afirma que decidió aspirar a la gobernación cuando se vio rodeado por algunos conservadores del Valle: “la motivación no arranca por mí, arranca por algunos colegas, excongresistas, el exgobernador Ubeimar (Delgado), el diputado Schneider (Rivas), el concejal de Cali Milton Castrillón. Me tomé el tiempo para pensarlo y decidí inscribirme para el aval”.
Al igual que Tamayo, y que el partido Conservador en Valle, John Jairo Caicedo ha apoyado la candidatura de Toro y de su ahijada política, Clara Luz Roldán, actual gobernadora.
Pero a Caicedo lo ven como una ficha de la directora de La U en los godos por la cercanía que han tenido.
Según cinco fuentes, tanto del partido Conservador como fuera de este, la cercanía con Caicedo también se da por ser uno de los dos diputados conservadores del Valle (de los tres que hay), que son de la bancada de gobierno y tiene representatividad en la gobernación vía el secretario de movilidad, Diego Adolfo Méndez. Y porque su esposa, Yazmín Andrea García, se lanzó a la Cámara de Representantes el año pasado por el partido de La U y se quemó.
Por su parte, Toro negó que le hubiera pedido a Caicedo que se lanzara a la gobernación y dijo que ni siquiera ella ha decidido si va por ese cargo. “De ninguna manera me voy a meter en otros partidos, ya tengo mucho trabajo en el mío”, aseguró. Frente a la estrategia de que el diputado se sume a su campaña, dijo que ella no había hablado de ese tema. Toro confirmó que hay conservadores que le han dicho que quieren acompañarla “pero yo no he hablado de aval”.
Para Tamayo, quien compite por el aval godo, la aspiración de Caicedo fue sorpresiva. “Lo que sabía era que él no iba a aspirar a la Asamblea”, comentó.
La puja por el aval
Ahora la clave es cómo se entregará el aval del partido conservador en el Valle. El precandidato cercano a Dilian dijo que acataría la decisión del directorio nacional: “Sí espero que el conservatismo del Valle haga un control ciudadano para que el aval no sea de bolsillo — dice Tamayo —. El tiempo dirá si fue un aval para fortalecer el partido o si fue una estrategia para fortalecer el poder que lleva 8 años reinando en el Valle”.
El aval será definido por el directorio nacional que está conformado por 16 personas entre congresistas y representantes de diferentes sectores. Entre estos está Blanca Cardona, representante por las mujeres, a quien las fuentes del partido Conservador la refieren como la encargada de las candidaturas y los avales en el Valle. Por ahora, la colectividad tiene abiertas las inscripciones para las precandidaturas, falta evaluar a los posibles candidatos y definir el mecanismo para entregar los avales que tienen como fecha límite el 30 de este mes.
Hasta el momento La Silla no pudo corroborar si Toro se estaba moviendo en las toldas conservadoras por el aval a Caicedo.
En lo que sí coincidieron todas las fuentes cercanas es que la directora de La U es cercana a Efraín Cepeda, director del partido Conservador, porque han trabajado juntos en la oposición a la reforma a la salud del gobierno Petro. Pero eso no asegura que, de moverse por Caicedo, le copien la idea del aval porque consideran que La U ha sido menos dura con el gobierno y se ha acercado a este en temas como la reforma a la salud.
Según Diego Ramos, expresidente del directorio conservador en Valle y cercano a Cepeda, el presidente de los godos también espera fortalecer el partido. “Fincho (Efraín Cepeda) me dijo: ‘hay que tener una vocación de poder’. Incluso me dijo que me lanzara para tener el aval y recuperar el poder en el departamento, pero yo lo estoy pensando”. Toro aseguró que ella no ha hablado del tema de los avales con Cepeda.
“El que va a tener el aval es que sea más amigo de Fincho, Blanca Cardona y Mario Germán Sánchez de Soto (diputado cercano a Cardona y a Toro)”, dice el excongresista Padilla. La Silla no pudo comunicarse con Cardona ni con Sánchez de Soto.
La definición del aval también enviará señales sobre un fenómeno político viejo en el Valle. Toro no solo es baronesa en su partido, sino que su poder se ha consolidado también a través de la influencia que tiene en otras colectividades.
La idea de que su movimiento, Nueva Generación, que es el más fuerte de La U en Valle, ha debilitado a los godos no es nueva. Para el excongresista Gustavo Padilla, es una realidad: “La mayoría de los que dicen ser conservadores en Valle tiene un pie en La U y otro en el conservatismo”, según él es por la burocracia y la cercanía con el grupo político de Toro.
Padilla nombra, por ejemplo, al diputado conservador Mario Germán Fernández de Soto, que viene de ser secretario de Educación y consejero para la Moralidad Administrativa, la Transparencia y la Lucha contra la Corrupción durante la gobernación de Toro. Fernández de Soto también tiene como cuota política a Rubén Felipe Lagarejo, gerente de la Beneficencia del Valle.
Según Padilla, la forma en que se han permeado los liderazgos del Conservador a La U es una razón por la que el partido se ha debilitado en el Valle. En 2017, el directorio del partido en el departamento ya había denunciado que dos diputados y varios alcaldes godos estaban haciendo campaña por la hoy senadora de La U, Norma Hurtado, de las entrañas de Toro y quien en ese momento aspiraba a la Cámara de Representantes.
A eso se suma la posibilidad de que la exdiputada conservadora, Amanda Ramírez, y el exconcejal conservador Albeiro Echeverry, aspirarán de nuevo a esos cargos, esta vez por La U, como contó el periodista político Aldemar Domínguez. Ninguno de los dos respondió si era cierta esa aspiración.
“El tema de que algunas personas que han sido conservadoras y quieran aspirar por La U si habría que preguntarles a ellos por qué lo hacen”, responde la directora de La U.
Sin embargo, lo que pase con ese aval va a ser clave para que la campaña a la gobernación despegue o no y para que los godos peleen una representación departamental.