El ministro de Defensa, Iván Velásquez, en la primera reunión con su homólogo venezolano Vladimir Padrino. Foto: Twitter MinDefensa.

En 2020, tres lanchas artilladas de la Armada Nacional usadas para el control fluvial del río Orinoco, en la frontera colombo-venezolana en Vichada, terminaron en manos de las fuerzas militares de Venezuela.

Desde entonces las lanchas están en poder de las fuerzas armadas del país vecino. Pero según supo La Silla Vacía por una alta fuente militar y otra del gobierno, mañana el régimen de Maduro las devolverá al gobierno colombiano tras una visita agendada del ministro de Defensa, Iván Velásquez, con su homólogo Vladimir Padrino en territorio venezolano.

La pérdida de los aparatos fue un golpe político al entonces presidente Iván Duque, que había roto relaciones con el gobierno de Nicolás Maduro. También fue una vergüenza para el honor militar de las fuerzas armadas colombianas, que perdieron las lanchas cuando “el centinela encargado de la seguridad de los botes se percata que, por efectos de una fuerte corriente, las embarcaciones son arrastradas por el río”, según un comunicado de la Armada.

Es decir, quedaron mal amarradas, y por el caso salieron 14 uniformados de la institución, tres suboficiales y 11 infantes de marina.

El intercambio se dará en la reunión de los dos ministros en Venezuela, que ya está en la agenda privada de Velásquez, según confirmó La Silla con las dos fuentes de alto nivel, ambas lo hicieron a condición de no revelar sus nombres, por tratarse de acuerdos que aún no son públicos.

Será la segunda reunión que tiene Velásquez con el ministro de Defensa chavista. El primer encuentro fue en septiembre del año pasado en un comando de la Guardia Nacional Bolivariana en el estado de Táchira, cerca a la frontera con Norte de Santander. 

Con la visita realizada hoy al Ministro de Defensa de Venezuela, @vladimirpadrino, empezamos a reconstruir la interlocución en materia de seguridad fronteriza, suspendida hace varios años. Un amplio y renovado diálogo binacional contribuirá al progreso de nuestros pueblos. pic.twitter.com/eGtkkGDTNQ

— Iván Velásquez Gómez (@Ivan_Velasquez_) September 25, 2022

El motivo de esa primera visita fue empezar “reconstruir la interlocución en materia de seguridad fronteriza”, como escribió Velásquez en su Twitter. Una interlocución que se perdió durante el gobierno de Duque, que vio a Venezuela como una “amenaza a la seguridad nacional”.

Desde ese primer encuentro, según la alta fuente militar consultada por La Silla, los ministros acordaron avanzar en un gesto simbólico para reconstruir las relaciones militares: la devolución del armamento de la Armada colombiana, a cambio de que Colombia devuelva varios fusiles decomisados a la Guardia Nacional Bolivariana por la Brigada Décima del Ejército, tras un cruce ilegal de la frontera de los militares del venezolanos.

Más allá del armamento, la devolución de las lanchas es un punto de honor para Nicolás Maduro.

Las lanchas que se llevó la corriente

La historia tiene origen hace tres años, el 9 de mayo de 2020, cuando las tres embarcaciones artilladas colombianas terminaron en territorio venezolano. Estas estaban en un puesto de la Armada en el departamento del Vichada, pero no estaban bien aseguradas y fueron arrastradas por la corriente del río Meta. Terminaron desembocando en el río Orinoco, en territorio venezolano, donde la Armada venezolana las recuperó.

“Le corresponde al Presidente de Colombia solicitarme el regreso de este equipo militar”, dijo Nicolás Maduro dos días después. Un mensaje para Iván Duque, quien lo desconocía como presidente de Venezuela y por el contrario había declarado al líder opositor, Juan Guaido, como el presidente legítimo de este país. Cómo pedir de vuelta el armamento le implicaba a Duque reconocer de facto al gobierno de Maduro, Duque no solicitó la devolución de los botes.

Dentro de las embarcaciones había ametralladoras calibre 50 y M60. Además de tener dos motores para desplazarse rápidamente por el río.

Ahora, según pudo confirmar La Silla, en Puerto Carreño se hará el acto simbólico de intercambio que sigue cimentando la relación del gobierno Petro con el de Maduro.

El Ministerio de Defensa le dijo a La Silla que, por ahora, no dará ninguna declaración al respecto.

Un nuevo paso en la cooperación militar en la frontera

Además, la visita de Velásquez da un nuevo paso en el restablecimiento de la cooperación militar, especialmente en los más de 2.200 kilómetros de la frontera, cuya seguridad se deterioró considerablemente durante la ruptura diplomática con Duque.

El ministro Velásquez ya dio pistas de un cambio en la relación. Un día antes de la publicación de la política de seguridad y defensa dijo a los directores de medios de comunicación que se está compartiendo información de inteligencia militar entre ambos países.

Según fuentes militares consultadas por La Silla, esa relación se ha estado empezando a reconstruir desde lo táctico. Es decir, la autorizaron es que haya interlocución entre los comandantes a nivel de batallones, que son las unidades militares que manejan los operativos desde lo local.

El presidente Gustavo Petro dijo que el nivel de esa cooperación militar con Venezuela está ayudando a presionar a la guerrilla del ELN. “Las Fuerzas Militares en Venezuela están actuando aliadas con el Gobierno colombiano, con su Ejército, quitando un espacio que antes tenía libremente el ELN”, le dijo el presidente a Semana.

Sin embargo, una fuente de inteligencia colombiana le dijo a La Silla que esa cooperación no estaba bien aceitada y que aún faltaba para hablar de una cooperación militar. Lo que sí confirmó fue que el gobierno venezolano había cambiado su relación frente a la guerrilla, que utilizaba a Venezuela como su retaguardia segura. 

Periodista de la Universidad de Antioquia. En La Silla Vacía empecé contando las movidas políticas de Antioquia como practicante, ahora escribo sobre el conflicto armado, las políticas de seguridad, la justicia transicional y los esfuerzos de paz en el país.