Pese a la transformación de Barranquilla en infraestructura, salud y educación, durante los ocho a?os del charismo, la inseguridad sigue siendo la principal queja de sus habitantes. Y el anuncio de la llegada del Ejército, en noviembre pasado, se dio justo en un momento crítico por una ola de atracos y homicidios.

Para este lunes 15 de febrero estaba programado el inicio de la polémica entrada del Ejército a las calles de Barranquilla para mejorar la seguridad. Según la Alcaldía, no pudo darse por el paro armado del ELN, que tiene a las Fuerzas Militares en máxima alerta. Sin embargo, La Silla comprobó que, hasta ahora, la llegada de los soldados es un globo del alcalde Alejandro Char porque en el Ejército el asunto no está ni en proyecto y ponen en duda que ese anuncio se materialice.

Desde el Comando Nacional del Ejército, en Bogotá, desmienten a la Alcaldía de Barranquilla. Allí niegan que los militares estén próximos a salir a las calles. Un vocero de esa institución le dijo a La Silla que todavía no hay “ningún acuerdo de patrullaje”.

“Colocar el Ejército a patrullar es una orden presidencial y ministerial, no de un alcalde”, aseguró el vocero.

Según nos explicaron desde Bogotá, la militarización solo será posible hasta que la Alcaldía, el Ministerio de Defensa y el Ejército lleguen a un acuerdo. Y como se hace vía decreto, ese proceso tomará tiempo. Pero, además, ni siquiera está en los planes de los militares.

“No está ni en proyecto. Por ahora, eso es demorado”, le respondió el vocero del Ejército a La Silla.

No fue posible que un miembro de la cúpula militar nos diera una entrevista porque, nos recalcó el vocero, “nadie va a salir a hablar” de lo que no se ha firmado.

Antes de contactar al Ejército en Bogotá, La Silla se comunicó con la Segunda Brigada del Ejército en Barranquilla y con la Policía Metropolitana de esa ciudad para conocer qué tanto han avanzado, desde enero, en el trabajo conjunto de seguridad del que habla la Alcaldía.

En ninguna de las dos instituciones hay información concreta al respecto y, como en el Comando Nacional del Ejército, también ponen en dudan que la militarización sea un hecho.

Tampoco fue posible hablar con el comandante de la Segunda Brigada, general Luis Mauricio Ospina Gutiérrez, ni con el comandante de la Policía, general Ricardo Londoño, porque sus jefes de prensa nos aseguraron que no tienen nada que declarar sobre el tema.

Extraoficialmente, La Silla supo que hasta ahora la Policía no ha hecho cambio alguno en su estrategia de seguridad para incluir a los militares en los supuestos patrullajes de las zonas más críticas, anunciados por la Alcaldía. Situación similar sucede en la Segunda Brigada. Allí siguen enfocados en su estrategia de combatir el secuestro y la extorsión a través del Gaula Militar, y en hacer presencia en los municipios del Atlántico con el Batallón de Ingenieros. Los patrullajes en la ciudad no están contemplados.

Pese a que en la Policía y en el Ejército aseguran que no hay avances, la Alcaldía insiste en que la llegada de los militares es cuestión de días.

El gerente del Área Metropolitana Jaime Berdugo, delegado por Char para hablar sobre el tema ante los medios, le dijo a La Silla que lo que falta para la llegada del Ejército es poco porque el “proceso está avanzado”. Y aseguró que el tema se analizará mañana, en un comité de orden público en Barranquilla, con la presencia de miembros de la Policía y el Ejército.

Aunque en el Ejército Nacional nos aseguraron que esa decisión depende del alto Gobierno.

Desde el 26 de octubre, un día después de su reelección, Char viene manifestando su intención de sacar el Ejército a las calles para disminuir los robos y homicidios, que hicieron que Barranquilla cerrara el 2015 como el año más violento de los últimos cinco. Esas cifras no se veían en esa ciudad desde 2007, cuando se desmovilizó el frente paramilitar José Pablo Díaz, que delinquió allí durante cuatro años, bajo las órdenes de Édgar Ignacio Fierro alias ‘Don Antonio’.

De hecho, la inseguridad ha sido una verdadera ‘papa caliente’ para el grupo político del alcalde Char, que no ha logrado enfriarla en los ocho años que lleva en el poder. Y ha tenido momentos críticos como en 2013, cuando hubo una seguidilla de homicidios por el no pago de extorsiones.  

Del ultimátum que le dio a la Policía, el entonces alcalde electo pasó a un anuncio concreto. En noviembre dijo que los militares llegaban el primero de enero y después, ese mes, que la salida definitiva quedaba para el 15 de febrero. 

Anunciando la llegada del Ejército, le explicó a La Silla en diciembre Rocío Mendoza, directora del programa Barranquilla cómo vamos, el alcalde se aseguraba un inicio de mandato “con una imagen de poder, contundencia y autoridad”, como en efecto ocurrió.

Por lo pronto, la llegada de los soldados no deja de ser un anuncio, que ya suma dos fechas fallidas.

Actualización: Ante el inicio de operaciones conjuntas entre el Ejército y la Policía, que a través de su cuenta de Twitter anunció el alcalde Alejandro Char el lunes 22 de febrero, volvimos a consultar a la Policía y el Ejército. Desde ambas entidades nos respondieron que no habrá patrullajes conjuntos, solo presencia del Ejército en la periferia de la ciudad, como parte de los habituales planes candados que realizan. E insistieron en que los patrullajes y los retenes móviles conjuntos, anunciados hace unas semanas por el alcalde Char, no son posibles porque dependen de una decisión del Gobierno central, como lo contamos en esta historia. “La Policía no realizará cambios en su labor diaria. Hay que tener en cuenta que los patrullajes no son en conjunto”, le dijo a La Silla un vocero de la Policía Metropolitana de Barranquilla.

Cofundadora y reportera de La Contratopedia Caribe. Comunicadora social y periodista, de la Universidad Autónoma del Caribe en Barranquilla, y magíster en Periodismo de Investigación, Datos y Visualización, de la Universidad Rey Juan Carlos de España como becaria de Google. Ha trabajado en los...