El nuevo sistema de distribución de las regalías está a punto de cumplir cuatro meses y hasta ahora no hay un solo proyecto aprobado o en trámite de aprobación, ni en las regiones productoras ni en las que por primera vez van a recibir los recursos de las regalías.

Hoy el Ministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry respondió a las críticas y culpó de las demoras al Congreso por no haber aprobado la conciliación del proyecto de regalías, pero el presidente de la Cámara, Simón Gaviria, lo tildó de “poco profesional” por presentar la ponencia sobre el tiempo y le pidió mayor eficiencia.

Esta no es la única diferencia frente a las posiciones del Gobierno. El director de Planeación, Mauricio Santa María, dice que la implementación del nuevo modelo de regalías funciona “a buena marcha”, los gobernadores dicen que no ha arrancado y los decretos que expidió el Gobierno en diciembre los metieron en un trámite engorroso que apenas están comenzando a desenredar.

Las cifras no coinciden. Santa María asegura que ya se han girado 420 mil millones de pesos de regalías directas para las regiones productoras, pero esta semana, en respuesta a un derecho de petición del Partido Liberal, el Ministro de Hacienda dijo que “a la fecha no se ha efectuado ningún giro con cargo a los recursos del Sistema Nacional de Regalías correspondiente a la vigencia de 2012”.

En departamentos como Santander, el recorte de las regalías significa un déficit de 244 mil millones de pesos; en el Meta, 687 mil millones de pesos menos cada año y en Huila, la disminución en los recursos de regalías se traduce en 50 por ciento menos para los gastos en salud. En Putumayo, la Gobernación no ha tenido cómo pagar el transporte escolar y en Casanare el déficit en la educación tiene en paro al departamento.

El problema es que los municipios y departamentos perdieron completamente la autonomía en el manejo de las regalías porque ahora son nuevas instancias -donde tiene participación mayoritaria el Gobierno nacional- las que deciden sobre las inversiones. Antes cada mes los departamentos y municipios productores recibían el giro de las regalías y con eso subsidiaban gran parte de la inversión. Hoy cuatro meses después de iniciada la gestión de los nuevos alcaldes y gobernadores no han podido invertir nada de las regalías.

El presupuesto general de regalías aumentó en marzo a 9,1 billones de pesos. Sin embargo, los cálculos de distribución entre los fondos está hecho sobre la base de 8,2 billones de pesos, que fue la cifra inicial que dio el Ministerio de Hacienda en diciembre. A ese monto se le resta lo que ya está comprometido en proyectos específicos (como el río Magdalena) y los gastos de administración, además del monitoreo quedan 7,9 billones para repartir entre 1.088 municipios y todos los departamentos.

Ayer en la comisión primera de la Cámara de Representantes se realizó un debate sobre la inconveniencia del nuevo régimen de regalías y ya algunos representantes de los municipios productores, como Santander, Putumayo y Casanare, anunciaron que presentarán un nuevo proyecto.

Este es el trámite que tiene que seguir un alcalde o un gobernador para que se le apruebe un proyecto. Y aquí están los trancones (haga clic sobre las fichas de color):

Cualquier persona puede presentar un proyecto de inversión y su estructuración. No están incluidos los gastos de funcionamiento ni los proyectos que busquen amortiguar la deuda del municipio o del departamento.

Esta parte del camino, que es apenas el arranque ya va bien. En la medida que los municipios y departamentos ajustan sus planes de desarrollo definen qué proyectos podrían estar financiados por las regalías. Un ejemplo es Santander, el primer departamento que ya tiene su plan de desarrollo aprobado. El gobernador Richard Aguilar explicó a La Silla Vacía que ese Plan ya se hizo con la previsión del recorte en las regalías y por eso se redujeron las metas, principalmente en la pavimentación de las vías terciarias.

Las entidades territoriales tendrán que decidir por dónde tramitan el proyecto, pues hay fondos diferentes que requieren la aprobación de un grupo diferente de personas:

Haga click en cada icono para conocer la información.

Para que sea recibido, el proyecto debe cumplir diez requisitos:

1. Descripción de la alternativa de la solución

2. Estudio de mercado

3. Capacidad y beneficiarios

4. Localización de la alternativa

5. Estudios ambientales

 

 

6. Análisis de riesgos

7. Costeo de la alternativa

8. Depreciación de activos fijos

9. Beneficios e ingreso

10. Créditos de amortización y pagos a capital

Los OCAD son los que definen los proyectos que se financiarán a través del Sistema General de Regalías. Lo que hace es evaluar, viabilizar, aprobar y priorizar la conveniencia del financiamiento de los proyectos.

El reglamento de funcionamiento de los OCAD no quedó incluido en los decretos expedidos por el Gobierno en diciembre. Pero quedó establecido que los debe definir la Comisión Rectora.

Si el proyecto es o no prioritario está en manos de los OCAD.
Y para ello hay doce puntos de medición
:

(Haga click en cada punto para conocer la información)

1. Impacto territorial, económico, social, cultural y ambiental.

El visto bueno final está en manos exclusivamente de los OCAD.

La aprobación de los recursos dependerá de la disponibilidad de recursos por parte del Ministerio de Hacienda. Aunque a comienzos de años, el Gobierno expidió el decreto con la distribución de los montos que debía recibir cada municipio y departamento por regalías, la entrega de la plata dependerá del impacto económico, social, cultural y ambiental, cumplimiento de metas de cada proyecto.

Los proyectos serán ejecutados por cualquier entidad de naturaleza pública designada por OCAD.
En este punto aún no se han generado dudas porque todavía ningún proyecto llega hasta aquí.

Soy periodista. Lo que más me apasiona es la investigación. Hago parte del comité directivo y soy socia fundadora de Consejo de Redacción, una organización de periodistas que promueve el periodismo de investigación. Desde que me gradué, en la Universidad...