Esto solo aplica para quienes tienen empleados que ganen menos de 10 salarios mínimos legales vigentes.

Desde el 1 de diciembre circula en Twitter un video de la ministra de Salud, Carolina Corcho, donde dice: “el sistema de salud hasta 2012 era financiado en una parte por los empleadores, pero hubo una reforma tributaria en el 2012 donde se quitaron los aportes de los patrones y se dejaron solo para entidades sin ánimo de lucro y entidades públicas. Luego el peso de la financiación de los patrones es mínima dentro del sistema de salud y eso lo suple el presupuesto general de la nación”.

El texto que acompaña el video dice que se trata de una “imprecisión” por parte de la Ministra.

Como usuarios nos pidieron verificar esa información y ha sido replicada en Facebook, le pasamos el Detector de Mentiras y encontramos que los empleadores sí están exonerados de pagar los aportes al régimen contributivo de salud de los empleados que ganan menos de 10 salarios mínimos legales vigentes. Aunque no son todos, la mayoría de trabajadores del país si están dentro de ese rango de salario.

Este es el trino:

La ministra Corcho hizo esa declaración en la plenaria del Senado del 29 de noviembre, en medio de un debate de control político sobre la reforma a la salud citado por el Centro Democrático.

En el minuto 2:45:20 de la transmisión en vivo que hizo el Canal del Congreso en YouTube se puede ver la invención de Corcho, donde hace la misma afirmación que circula en Twitter.

YouTube video

Es cierto

Anteriormente el régimen contributivo del sistema de salud en su totalidad se financiaba con los aportes obligatorios que debían realizar los empleados y empleadores: a los primeros les correspondía pagar el 4% y a los segundos el 8.5%, para un total de 12.5%.

Sin embargo, la ley 1607 de 2012, que fue una reforma tributaria del entonces presidente Juan Manuel Santos, creó el Impuesto sobre la renta para la equidad (Cree). A cambio de pagar un impuesto sobre sus utilidades las empresas quedaban exoneradas de los aportes parafiscales al Sena, Icbf y los aportes a la salud por los empleados que devengaran menos de diez salarios mínimos legales mensuales vigentes. Aunque esto no aplicaba para personas naturales que tuvieran menos de dos trabajadores.

Este impuesto se creó para promover el empleo, ya que para las empresas resultaba más rentable pagar un impuesto por el total de sus utilidades, que hacer aportes por cada uno de sus empleados. Inicialmente se estableció que la tarifa del Cree sería del 9 por ciento para los años 2013, 2014 y 2015, y del 8 por ciento para los siguientes años.

Aunque la reforma tributaria de 2016 (ley 1819 de 2016), eliminó el Cree, dejó la exoneración de aportes para algunas empresas, y en su lugar incluyó una sobretasa al impuesto de renta para los aportes a salud.

Actualmente, el artículo 114-1 dice que las empresas o personas jurídicas que declaran renta no deben realizar los aportes a salud que le corresponden por los empleados que reciban un sueldo de menos de 10 salarios mínimos mensuales (10 millones de pesos para 2022). En esos casos, solo se pagarán los aportes que se deducen al trabajador, que corresponden al 4 por ciento, y el Gobierno asumirá el 8.5 por ciento. Tal como afirma Corcho.

Algo que no menciona la Ministra, es que el empleador deberá pagar los aportes a salud completos de los trabajadores que reciban 10 salarios mínimos o más. Si bien estos son una minoría. Según la Dian, solo 3.98 millones de los trabajadores, de 20 millones que hay en el país, declararon el impuesto de renta el año pasado, es decir, solo el 19.9 por ciento gana más de 4 millones de pesos mensuales.

La reforma tributaria del gobierno de Gustavo Petro, que fue aprobada por el Congreso el 3 de noviembre, mantiene esa exoneración de aportes.

En suma, los empleadores sí están exonerados de pagar los aportes al régimen contributivo de salud, excepto con respecto a los empleados que ganen más de 10 salarios mínimos legales vigentes. Por eso calificamos la afirmación de Corcho como cierta, pero con una salvedad.

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Haremos lo posible por chequearlo.

Soy fact-checker del Detector de Mentiras de La Silla Vacía. Estudié Comunicación Social y Periodismo en la Universidad Pontifica Bolivariana seccional Bucaramanga. En dos ocasiones he recibido el premio de periodismo Luis Enrique Figueroa Rey, en 2019 fue a mejor trabajo de periodismo universitario...