En este 2023 se cumplen 20 años de la campaña y elección de Hugo Aguilar Naranjo como gobernador de Santander. Los Aguilar, el clan político más grande y peligroso de la región, intentan mantener su poder en el Palacio Amarillo. Esta vez en cuerpo ajeno. El encargado es el politiquero de manual, Héctor Mantilla Rueda.

Mantilla, ahijado político y de matrimonio de la conservadora y exvicepresidenta, Martha Lucía Ramírez, fue alcalde de Floridablanca para el periodo 2016-2019. Hay que remarcar aquí, que esta ciudad es la que maneja el tercer presupuesto público del departamento. Su nombre no es desconocido, incluso a nivel nacional, pues ostentó ser el “alcalde más joven del país”. Con 21 años, gobernó la ciudad dulce en medio de escándalos que iban desde el enriquecimiento ilícito, contrataciones a dedo, desfalcos e intentos por atornillarse en el poder.

La politiquería corre por sus venas. Es nieto del concejal y patriarca del “mantillismo”, Guillermo Mantilla. Sobrino de Jorge Humberto Mantilla, también concejal, alcalde y tres veces congresista, e hijo de Jairo Alfonso Mantilla, concejal y diputado.

Desde su campaña a la alcaldía se pintó como un político joven con ideas nuevas, pero detrás de él, además de su familia, estaba: el súperpoderoso Fredy Anaya, la exesposa del parapolítico Luis Alberto Gil, Doris Vega, y los hermanos Bernabé y Álvaro Celis, fichas extintas del “vargallerismo” en Santander.

Finalizado su mandato, dejó montado a su antiguo director de Tránsito y actual alcalde de Floridablanca, Miguel Ángel Moreno, también amigo y compañero universitario. Pero sus desencuentros lo llevaron a ser opositor y a medirse el aceite, el año pasado, en las elecciones legislativas en su fortín político, Floridablanca. El ganador fue Moreno al llevar como Representante a la Cámara a Álvaro Rueda por el partido Liberal. Héctor, que iba con las banderas conservadoras, perdió contra Luis Eduardo Díaz Mateus (ojo, impulsado por los Aguilar).

Unos meses después, soñó y sonó con ser el viceministro de Transporte del gobierno del cambio, luego de hacerle campaña a Petro en Santander en segunda vuelta. Su hoja de vida fue entregada por su madrina, Martha Lucía Ramírez, al entonces ministro conservador, Guillermo Reyes González.

Acostumbrado a cargar maletas, como lo hizo desde 2014 cuando fue coordinador de la campaña presidencial de Martha Lucía, su avanzada ya llega a los municipios de Santander. Típico sello Aguilar. Acompañado de la fuerza burocrática del actual gobernador, Mauricio Aguilar Hurtado, este clan se la juega por un candidato que no lleva su apellido. ¿Por qué?

Aguilar en cuerpo ajeno

A parte de un Hugo Aguilar acogiéndose a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y confesando sus nexos paramilitares o de un Richard Aguilar preso por presunta corrupción en contratos, la política en Santander desde la llegada de Rodolfo Hernández y los verdes (Ferley Sierra, Carlos Parra, Cristian Avendaño, Fabián Díaz y JP Hernández) no es la misma.

Estos outsiders animaron, sin quererlo, el voto de opinión tan inusual en esta zona del país. Ahora en las campañas, ir en contra de las mafias y del clan Aguilar, es ley. Por eso, la apuesta es en cuerpo ajeno. Es muy posible que el apellido Aguilar directo no gane. Y no es que le falten hijos al excoronel, que tiene nueve, sino que el lastre de parapolítica y corrupción es muy pesado.

Con un Rodolfo menguado e inhabilitado y una campaña verde (Ferley Sierra) que no despega, los santandereanos vuelven a estar en manos de los Aguilar, que ganan con cara y sello. De frente van con Mantilla y detrás está un exmilitar, Juvenal Díaz Mateus, hermano de Luis Eduardo e Iván Díaz Mateus, este último condenado por “Yidispolítica”. Con los Díaz Mateus, como se señaló anteriormente, el clan también ha tranzado.

La historia reciente pareciera condenarlos a la hoguera de las urnas. Sin embargo, el poder acumulado es tal que el apellido de Hugo, Richard y Mauricio seguirá manejando los hilos de lo que alguna vez fue cuna de liberales. Por todo esto, por el sondeo popular y las encuestas, es que se puede afirmar que desde septiembre: los Aguilar ya tienen gobernador en Santander.

Soy la editora del Detector de Mentiras en La Silla Vacía desde 2024. Estudié Comunicación Social y Periodismo. Soy especialista en Derecho Constitucional de la Universidad Externado y candidata a magíster en Estudios Culturales Latinoamericanos de la Universidad Javeriana. Fui profesora del programa...